lunes, 26 de noviembre de 2012

Madriz, Madriz, Madriz


Madrid me recibe,
Entrada la noche
Con “Control de Pasaporte”
Para “Recogida de equipajes”
Y tras la puerta
Familiares a la espera
En soñolientas sonrisas

Madrid me saluda
Desde sus 30 grados
Sus calles estrechas
Repleta de gente
Sus miles carteles
Plazas, terrazas,
Coches en atasco
Estatuas vivientes
Negociantes de oro
Camareros fumando
Viejos del chinchón 
El bingo, la loto
Africanos vendiendo
Chinos ofertando
Papeles volando
Y un sol “de justicia”
Que nunca se esconde

Madrid se me acerca,
Vestido de cambios,
Locales que quiebran,
Algunos nuevos mobiliarios
IVA en empinada,
Metro “más por menos”
Ajustes, recortes,
Bares con mejores precios
Pocas sobremesas
Aumento de parados
Atestando tiendas de segunda mano
Menos inmigrantes
Más azules con porras
Recién graduados con gesto resignado
Mascullan  “Aquí no hay trabajo”
Los cursos de idiomas se han multiplicado

Madrid, me besa
Su gente me abraza
En la compacta masa
Que barre las calles
Que invade el congreso,
Sol,
El ayuntamiento,
Atocha,
El ministerio,
El paseo del prado,
El palacio de correos,
Recoletos
Si hace falta El senado,
La plaza de España
A España despierta con manis y huelgas
Denunciando a los culpables a gritos en pecho
“Dad la cara, al menos”
Aire atragantado por demasiado tiempo

Madrid me pregunta
Acaso preocupado,
-¿Estás bien?
- ¿Yo?...

               ....Asimilando

jueves, 26 de julio de 2012

Rigor Mortis

Porque rechazas lo contrario con tus gestos demudados, porque miras adusta por encima de tantos hombros, porque pretendes correr sin haber apenas aprendido a caminar, porque nunca preguntas el por qué.

Porque prefieres ignorar los abismos que se abren con tus pasos a asomarte a ellos y palpar sus profundidades. Porque para tí las profundidades se han quedado en charlas vanas, adormecidas en la atmósfera pastosa de las madrugadas civiles.

Porque te muestras erguida, henchida, cubierta de tus metales pesados que relucen y al mismo tiempo aplastan. Y te pavoneas ante un público abatido y agónico, agitando ante sus miembros rotos los abrigos que antes lo cubrían.


Porque te haces llamar "primer mundo". 

lunes, 18 de junio de 2012

Лолита

"Lolita" no es la pasión corrompida, ni el delirio de un enfermo, ni una burla a las normas morales. "Lolita" es la historia de un amor fallido. Es el relato claro, lastimero y sincero del romántico intelectual que persigue el amor platónico. Humbert es consciente de la diferencia de edad con su Lolita, de los defectos exasperantes de ésta, de su rechazo continuo hacia él. Y siendo consciente de ello la sigue, la venera, la ama.

Humbert descubre que ama a Dolores Haze cuando se reencuentra con ella, después de haber estado tres años desaparecida. Su relación anterior con Lolita había sido de manipulación mutua, Humbert saciando cada capricho de la niña a cambio de sus caricias; un intercambio de intereses. 

Pero entónces se llega al reencuentro, una parte clave del libro. Humbert se reencuentra con su Lolita, ya crecida, ajada, embarazada; nunca más una ninfa. Y es en ese momento cuando se inserta uno de los párrafos más hermosos del libro:

She closed her eyes and opened her mouth, leaning back on the cushion, one felted foot on the floor. The wooden floor slanted, a little steel ball would have rolled into the kitchen. I knew all I wanted to know. I had no intention of torturing my darling. Somewhere beyond Bill's shack an afterwork radio had begun singing of folly and fate, and there she was with her ruined looks and her adult, rope-veined narrow hands and her goose-flesh white arms, and her shallow ears, and her unkempt armpits, there she was (my Lolita!), hopelessly worn at seventeen, with that baby, dreaming already in her of becoming a big shot and retiring 2020 A.D- and I looked and looked at her, and new as clearly as i know I am to die, that I loved her more than anything I had ever seen or imagined on earth, or hoped for anywhere else. 

Humbert ama a Dolores Haze y en este último encuentro le ofrecerá su dinero, su coche, su casa, sin pedirle nada a cambio. 

martes, 20 de marzo de 2012

Züruck bleiben, bitte

Tente
Sostén el deseo
¡Suspéndelo!

No en el aire si es posible
No sea que se caiga.
La tensión no es una metáfora,
en este caso.
Te agradezco que calles
aunque tus ojos murmuren lo que mi mente niega

Canalla sentimiento
No, no,
espera, no te muevas.
Hasta el más leve balanceo de tus dedos
podría deshacer
el nudo de mis manos
a mi espalda
censurando a mis labios,
prietos.

Sonrisa cortés,
vacía.
Abrazo partido y
¡Hasta otra!

Ése, mi amor, es el éxito del deseo encadenado

Pulsión

Algo se mueve,
imperceptible
Un suspiro
Un momento ya pasado.

Algo se ha movido,
En el recuerdo
del presente tuerto
preguntando al futuro
sordo
que contempla un pasado mudo.

Toca las cuerdas,
lo invisible.

Desconexión de redes,
enredándose.

Y sin saber por qué,
Sin saber por donde,
Pasado, furturo y presente
en tremenda avalancha
se arremeten.




martes, 31 de enero de 2012

domingo, 15 de enero de 2012

Mein lieblich

Y entre las cosas que escribo, nunca hablo del amor. Al menos no de cara al público, al menos no del amor de pareja. El amor me lo reservo para los cuadernos, para la escritura a mano, para mis momentos de sentimentalismos. ¿Y por qué escribo ahora? ¿En un sitio, al menos en teoría, accesible a todo el mundo? No tengo un por qué, tengo mis esperanzas puestas en algo que se esfuma, que me empeño en retener, pero, como humo que es, se ha ido escapando por los resquicios.

El amor, yo no lo entiendo, como la inmensa mayoría, o al menos aquellos que son sinceros. Sentí tanto por alguien tan distinto a mí, tan impensable que pudiera amar. Pero él es el humo y me temo que el tiempo y la distancia los resquicios.